Ribadeo en 1, 2 o 3 días
Itinerarios para descubrir Ribadeo a tu ritmo
Ribadeo invita a descubrirlo sin prisa. Pero también es posible llevarse una imagen completa en una escapada breve. Para que puedas descubrir la villa a tu ritmo, te sugerimos estos itinerarios de uno, dos y tres días.
Un día en Ribadeo: lo esencial en una jornada
Mañana
Tarde
Noche
Plaza de España, casco histórico y barrio indiano
La mejor forma de empezar el día es en la Plaza de España. Es el punto de partida perfecto para explorar el centro urbano. Allí mismo encontrarás la oficina de turismo y podrás solicitar un mapa-guía con rutas y horarios recomendados (especialmente útil si tienes previsto visitar la Playa de As Catedrais, recuerda que su acceso depende de la bajamar).
Antes de abandonar la plaza, tómate un momento para disfrutar de las vistas. En ella se alzan edificios clave para entender la historia local: el palacio de Ibáñez, la cosmopolita Torre de los Moreno, el Convento de Santa Clara y la iglesia parroquial de Santa María del Campo. Cuando hayas tenido suficiente, puedes elegir entre dos recorridos. Con el primero, te adentrarás en el casco histórico, declarado Bien de Interés Cultural. Si optas por el segundo, recorrerás la calle peatonal y llegarás al barrio de San Roque, conocido por sus casonas indianas de vivos colores y jardines cuidados.
Comer en el centro
A lo largo del recorrido encontrarás una variada oferta de restaurantes, bares y tascas donde disfrutar de la gastronomía local.
Rinlo, litoral y Playa de As Catedrais
Tras la pausa para la comida, puedes ir a recorrer parte de la ruta del litoral y los miradores, con dirección a Rinlo. Este pequeño puerto de origen medieval conserva su urbanismo tradicional y una fuerte identidad marinera.
Si la marea lo permite, el recorrido continúa hasta la Playa de As Catedrais, uno de los arenales más espectaculares de Galicia. Sus acantilados y formaciones rocosas recuerdan a las grandes catedrales góticas. ¡Recuerda consultar en la oficina de turismo cuál es el momento adecuado para acceder al arenal!
Cena y ambiente ribadense
De regreso al centro, te espera una cena con sabor local. Algunos restaurantes ofrecen menús degustación con productos de temporada y proximidad, ideales para acabar el día por todo lo alto.
Después, puedes alargar la jornada en alguna de las terrazas, bares o locales con música en directo. La noche en Ribadeo tiene opciones para todos.
Un día en Ribadeo: lo esencial en una jornada
Mañana
Plaza de España, casco histórico y barrio indiano
La mejor forma de empezar el día es en la Plaza de España. Es el punto de partida perfecto para explorar el centro urbano. Allí mismo encontrarás la oficina de turismo y podrás solicitar un mapa-guía con rutas y horarios recomendados (especialmente útil si tienes previsto visitar la Playa de As Catedrais, recuerda que su acceso depende de la bajamar).
Antes de abandonar la plaza, tómate un momento para disfrutar de las vistas. En ella se alzan edificios clave para entender la historia local: el palacio de Ibáñez, la cosmopolita Torre de los Moreno, el Convento de Santa Clara y la iglesia parroquial de Santa María del Campo. Cuando hayas tenido suficiente, puedes elegir entre dos recorridos. Con el primero, te adentrarás en el casco histórico, declarado Bien de Interés Cultural. Si optas por el segundo, recorrerás la calle peatonal y llegarás al barrio de San Roque, conocido por sus casonas indianas de vivos colores y jardines cuidados.
Comer en el centro
A lo largo del recorrido encontrarás una variada oferta de restaurantes, bares y tascas donde disfrutar de la gastronomía local.
Tarde
Rinlo, litoral y Playa de As Catedrais
Tras la pausa para la comida, puedes ir a recorrer parte de la ruta del litoral y los miradores, con dirección a Rinlo. Este pequeño puerto de origen medieval conserva su urbanismo tradicional y una fuerte identidad marinera.
Si la marea lo permite, el recorrido continúa hasta la Playa de As Catedrais, uno de los arenales más espectaculares de Galicia. Sus acantilados y formaciones rocosas recuerdan a las grandes catedrales góticas. ¡Recuerda consultar en la oficina de turismo cuál es el momento adecuado para acceder al arenal!
Noche
Cena y ambiente ribadense
De regreso al centro, te espera una cena con sabor local. Algunos restaurantes ofrecen menús degustación con productos de temporada y proximidad, ideales para acabar el día por todo lo alto.
Después, puedes alargar la jornada en alguna de las terrazas, bares o locales con música en directo. La noche en Ribadeo tiene opciones para todos.
Qué ver en Ribadeo en dos días
Día 1
Día 2
Mañana
Centro histórico, barrio indiano y vida local
Empieza el día en la Plaza de España, allí se sitúa la oficina de turismo. Es buena idea solicitar un plano con rutas, información de mareas y puntos clave para organizar la jornada. Este espacio central está rodeado de edificios con historia: el palacio de Ibáñez, la Torre de los Moreno, el convento de Santa Clara o la iglesia de Santa María del Campo.
Cuando hayas acabado de disfrutar de esta zona, puedes optar por dos recorridos. El primero te lleva por la calle peatonal, llena de comercios y cafeterías. Tras recorrerla, llegarás al barrio indiano de San Roque. En él se conservan algunas de las casonas más emblemáticas construidas por los emigrantes retornados de América, con fachadas decoradas y jardines con palmeras.
El segundo recorrido desciende hacia el casco histórico, declarado Bien de Interés Cultural. En él se mezclan casas señoriales y arquitectura popular. Al final del camino, junto al mar, espera la Capilla de la Atalaia (siglo XII), con una vista inmejorable del puerto deportivo y de la Ría de Ribadeo. Para bajar al puerto puedes usar el ascensor panorámico, una forma práctica de conectar ambas zonas.
Tarde
Puerto, paseo en barco y mirador de Santa Cruz
Después del paseo por el casco antiguo y el puerto, puedes comer en alguno de los restaurantes del puerto deportivo. Pescados y mariscos frescos como el pulpo, la lubina o las navajas protagonizan muchas de las cartas.
Por la tarde, una buena opción es embarcarse en un paseo en barco por la ría. Desde el mar podrás descubrir una nueva perspectiva de Ribadeo y del estuario que une Galicia y Asturias. Si lo deseas, puedes desembarcar en Castropol o Figueras y tomarte un culín de sidra antes de regresar.
De vuelta al centro, un paseo hasta el Monte de Santa Cruz te recompensará con una de las mejores vistas panorámicas de la Ría de Ribadeo.
Noche
Tapas, vino y ambiente local
La cena puede ser informal y sabrosa. Una ruta de tapas en cualquiera de los bares y restaurantes del centro. La llamada «cocina en miniatura», maridada con vinos gallegos con Denominación de Origen, ofrece una experiencia gastronómica completa y ligera.
La noche ribadense es animada y acogedora. Terrazas, bares con música en directo y locales con ambiente tranquilo o festivo te invitan a alargar la jornada al ritmo que prefieras.
Mañana
Rinlo, faros y tradición marinera
El segundo día de este itinerario te lleva hacia la costa. Puedes comenzar recorriendo la ruta de los miradores desde la calle del Faro y hacer una parada en uno de los lugares más emblemáticos de Ribadeo: la Isla Pancha. Esta pequeña isla, unida a tierra firme por una pasarela, alberga dos faros y ofrece una panorámica espectacular del Cantábrico.
La siguiente parada es Rinlo, un pequeño puerto tradicional de origen medieval que conserva el trazado estrecho de sus calles (“congostras”) y el carácter marinero de sus viviendas. No dejes de acercarte a las antiguas cetáreas ―hoy parte del patrimonio local― y disfrutar del ambiente tranquilo del pueblo.
Tarde
Playas, litoral y As Catedrais
Después de un paseo por Rinlo, nada mejor que una comida frente al mar. El arroz caldoso con bogavante es el plato estrella de la zona. No te pierdas tampoco los percebes y otros mariscos capturados por las propias mariscadoras del pueblo.
Por la tarde, puedes seguir la Ruta de las Playas. A lo largo del recorrido encontrarás arenales como Esteiro, Illas o Os Castros, ideales para un baño o para tomarse un respiro frente a los acantilados. El broche perfecto lo pone la Playa de As Catedrais, declarada Monumento Natural y reconocida como una de las más espectaculares del mundo. Sus arcos y formaciones rocosas sólo se pueden visitar con marea baja. No olvides consultar los horarios antes de tu visita.
Noche
Gastronomía con sello local y cultura todo el año
Para la cena, puedes elegir entre los menús degustación de algunos de los restaurantes del centro o acercarte a los locales de la N-634. En todos se sirve cocina tradicional gallega con productos de temporada: carnes a la brasa, fabadas, habas con almejas o platos de cuchara.
Ribadeo ofrece, además, una completa programación cultural a lo largo del año. Música en directo, teatro, narración oral o actividades familiares forman parte habitual de su agenda.
Qué ver en Ribadeo en dos días
Día 1
Mañana
Centro histórico, barrio indiano y vida local
Empieza el día en la Plaza de España, allí se sitúa la oficina de turismo. Es buena idea solicitar un plano con rutas, información de mareas y puntos clave para organizar la jornada. Este espacio central está rodeado de edificios con historia: el palacio de Ibáñez, la Torre de los Moreno, el convento de Santa Clara o la iglesia de Santa María del Campo.
Cuando hayas acabado de disfrutar de esta zona, puedes optar por dos recorridos. El primero te lleva por la calle peatonal, llena de comercios y cafeterías. Tras recorrerla, llegarás al barrio indiano de San Roque. En él se conservan algunas de las casonas más emblemáticas construidas por los emigrantes retornados de América, con fachadas decoradas y jardines con palmeras.
El segundo recorrido desciende hacia el casco histórico, declarado Bien de Interés Cultural. En él se mezclan casas señoriales y arquitectura popular. Al final del camino, junto al mar, espera la Capilla de la Atalaia (siglo XII), con una vista inmejorable del puerto deportivo y de la Ría de Ribadeo. Para bajar al puerto puedes usar el ascensor panorámico, una forma práctica de conectar ambas zonas.
Tarde
Puerto, paseo en barco y mirador de Santa Cruz
Después del paseo por el casco antiguo y el puerto, puedes comer en alguno de los restaurantes del puerto deportivo. Pescados y mariscos frescos como el pulpo, la lubina o las navajas protagonizan muchas de las cartas.
Por la tarde, una buena opción es embarcarse en un paseo en barco por la ría. Desde el mar podrás descubrir una nueva perspectiva de Ribadeo y del estuario que une Galicia y Asturias. Si lo deseas, puedes desembarcar en Castropol o Figueras y tomarte un culín de sidra antes de regresar.
De vuelta al centro, un paseo hasta el Monte de Santa Cruz te recompensará con una de las mejores vistas panorámicas de la Ría de Ribadeo.
Noche
Tapas, vino y ambiente local
La cena puede ser informal y sabrosa. Una ruta de tapas en cualquiera de los bares y restaurantes del centro. La llamada «cocina en miniatura», maridada con vinos gallegos con Denominación de Origen, ofrece una experiencia gastronómica completa y ligera.
La noche ribadense es animada y acogedora. Terrazas, bares con música en directo y locales con ambiente tranquilo o festivo te invitan a alargar la jornada al ritmo que prefieras.
Día 2
Mañana
Rinlo, faros y tradición marinera
El segundo día de este itinerario te lleva hacia la costa. Puedes comenzar recorriendo la ruta de los miradores desde la calle del Faro y hacer una parada en uno de los lugares más emblemáticos de Ribadeo: la Isla Pancha. Esta pequeña isla, unida a tierra firme por una pasarela, alberga dos faros y ofrece una panorámica espectacular del Cantábrico.
La siguiente parada es Rinlo, un pequeño puerto tradicional de origen medieval que conserva el trazado estrecho de sus calles (“congostras”) y el carácter marinero de sus viviendas. No dejes de acercarte a las antiguas cetáreas ―hoy parte del patrimonio local― y disfrutar del ambiente tranquilo del pueblo.
Tarde
Playas, litoral y As Catedrais
Después de un paseo por Rinlo, nada mejor que una comida frente al mar. El arroz caldoso con bogavante es el plato estrella de la zona. No te pierdas tampoco los percebes y otros mariscos capturados por las propias mariscadoras del pueblo.
Por la tarde, puedes seguir la Ruta de las Playas. A lo largo del recorrido encontrarás arenales como Esteiro, Illas o Os Castros, ideales para un baño o para tomarse un respiro frente a los acantilados. El broche perfecto lo pone la Playa de As Catedrais, declarada Monumento Natural y reconocida como una de las más espectaculares del mundo. Sus arcos y formaciones rocosas sólo se pueden visitar con marea baja. No olvides consultar los horarios antes de tu visita.
Noche
Gastronomía con sello local y cultura todo el año
Para la cena, puedes elegir entre los menús degustación de algunos de los restaurantes del centro o acercarte a los locales de la N-634. En todos se sirve cocina tradicional gallega con productos de temporada: carnes a la brasa, fabadas, habas con almejas o platos de cuchara.
Ribadeo ofrece, además, una completa programación cultural a lo largo del año. Música en directo, teatro, narración oral o actividades familiares forman parte habitual de su agenda.
Escapada de tres días para vivir Ribadeo a fondo
Día 1
Día 2
Día 3
Mañana
Casco histórico y Barrio Indiano
Este itinerario, al igual que los dos anteriores, empieza en la Plaza de España. En ella se concentran algunos de los edificios más emblemáticos de la villa: el palacio de Ibáñez, la Torre dos Moreno, el Convento de Santa Clara o la iglesia de Santa María del Campo.
Desde este punto puedes elegir entre recorrer el casco histórico —con casas blasonadas, marineras y la Capilla de la Atalaya con vistas a la ría— o dejarte llevar por el bullicio de la calle peatonal y descubrir el barrio de San Roque, que alberga el mejor conjunto de arquitectura indiana de Galicia. En este entorno también puedes visitar la Plaza de Abastos, abierta cada mañana (excepto domingos) y repleta de productos frescos del mar y de la huerta.
Tarde
Paseo por la ría y miradores con vistas
Después de comer, te proponemos un paseo en barco por la Ría de Ribadeo. Desde el agua, la villa se revela desde otro ángulo. Además, puedes aprovechar para cruzar a Castropol o Figueras, ya en la costa asturiana.
Al regresar, date un baño si la marea acompaña en la playa dos Bloques. O recorre la Senda Azul, que te llevará hasta el antiguo molino de mareas, uno de los rincones más tranquilos del entorno portuario. Finaliza la tarde subiendo al Monte de Santa Cruz, el principal mirador panorámico de Ribadeo.
Noche
Tapas, vinos y vida nocturna
La mejor forma de terminar el día es salir a tapear por el centro. Muchos restaurantes ofrecen cocina en miniatura con productos de proximidad, acompañada de vinos con Denominación de Origen gallega.
Si te apetece alargar la noche, Ribadeo cuenta con locales animados, terrazas y bares con música en directo que hacen de su ambiente nocturno uno de los más animados de la comarca.
Mañana
Ruta costera, Isla Pancha y Rinlo
Puedes empezar la jornada junto al mar, recorriendo la ruta de miradores que discurre entre acantilados y praderas abiertas. Es un tramo perfecto para caminar con calma, tomar fotos y disfrutar del paisaje atlántico.
A medio camino te espera Isla Pancha, con sus faros emblemáticos, uno de los lugares más fotografiados de Ribadeo. Poco después, el camino te lleva hasta Rinlo, antiguo puerto medieval que conserva su trazado tradicional y su alma marinera. Pasea por sus congostras, descubre las cetáreas construidas sobre la roca viva y, si te apetece, tómate un café junto al puerto.
Tarde
Playas y As Catedrais
Después de comer, sigue explorando el litoral por la conocida Ruta de las Playas, un recorrido entre arenales escondidos, entrantes rocosos y paisajes moldeados por el mar. Algunas paradas recomendadas: Esteiro, Illas u Os Castros, perfectas para bañarse o sentarse a admirar las vistas.
Reserva la última hora de la tarde para visitar la Playa de As Catedrais, el gran icono natural de Ribadeo. Declarada Monumento Natural, sus arcos de piedra, bufaderos y acantilados esculpidos por la marea crean un escenario espectacular. Asegúrate de consultar el horario de bajamar para disfrutarla en todo su esplendor.
Noche
Cena con sabor atlántico y ambiente cultural
A lo largo de la N-634 encontrarás varios restaurantes con especialidades locales: carnes a la brasa, fabada, habas con almejas o pescados frescos. Otra opción es volver al centro y optar por un menú degustación con productos de cercanía.
Para terminar el día, Ribadeo ofrece una agenda cultural variada: conciertos, teatro, espectáculos de pequeño formato… Consulta la programación y anímate a cerrar la jornada con un plan diferente.
Mañana
Senderismo, miradores y paisajes del interior
El tercer día es ideal para descubrir la parte más tranquila y menos conocida del municipio. Puedes alquilar una bicicleta o prepararte para una ruta de senderismo por el interior de Ribadeo. Una de las más recomendables es la Ruta del Monte, que conecta las parroquias de Ove y Remourelle.
Durante el recorrido encontrarás miradores como el de Santa Cruz, A Coroa o O Comado. También podrás acercarte a enclaves arqueológicos como las mámoas de Rego de Mel. Todos son paisajes verdes y serenos, perfectos para desconectar y disfrutar del entorno natural a otro ritmo.
Tarde
Santuario, fervenza y tesoros ocultos
Por la tarde te sugerimos una escapada a A Ponte (Arante) para visitar el Santuario de Nosa Señora das Virtudes, conocido por sus valiosas pinturas murales y apodado “la Capilla Sixtina del Camino del Norte”.
Muy cerca se encuentra el Pozo Mouro o Fervenza de Lexoso, una pequeña cascada rodeada de vegetación autóctona que sorprende por su belleza. De regreso al centro, aún puedes hacer dos paradas especiales: el Pazo de Cedofeita, joya de la arquitectura hidalga gallega (visita exterior), y las Pegadas do Encanto, unos curiosos petroglifos podomorfos situados en una zona de leyenda (visita bajo reserva).
Noche
Despedida con mariscos y vistas a la ría
Para cerrar esta escapada de tres días, nada mejor que una cena a base de mariscos del Cantábrico. Podrás probar centollas, nécoras, percebes, camarones o incluso ostras cultivadas en la ría (solo en temporada).
Escoge un restaurante con terraza junto al puerto o en el centro histórico y brinda por una experiencia completa en Ribadeo: cultura, naturaleza, sabor y autenticidad.
Escapada de tres días para vivir Ribadeo a fondo
Día 1
Mañana
Casco histórico y Barrio Indiano
Este itinerario, al igual que los dos anteriores, empieza en la Plaza de España. En ella se concentran algunos de los edificios más emblemáticos de la villa: el palacio de Ibáñez, la Torre dos Moreno, el Convento de Santa Clara o la iglesia de Santa María del Campo.
Desde este punto puedes elegir entre recorrer el casco histórico —con casas blasonadas, marineras y la Capilla de la Atalaya con vistas a la ría— o dejarte llevar por el bullicio de la calle peatonal y descubrir el barrio de San Roque, que alberga el mejor conjunto de arquitectura indiana de Galicia. En este entorno también puedes visitar la Plaza de Abastos, abierta cada mañana (excepto domingos) y repleta de productos frescos del mar y de la huerta.
Tarde
Paseo por la ría y miradores con vistas
Después de comer, te proponemos un paseo en barco por la Ría de Ribadeo. Desde el agua, la villa se revela desde otro ángulo. Además, puedes aprovechar para cruzar a Castropol o Figueras, ya en la costa asturiana.
Al regresar, date un baño si la marea acompaña en la playa dos Bloques. O recorre la Senda Azul, que te llevará hasta el antiguo molino de mareas, uno de los rincones más tranquilos del entorno portuario. Finaliza la tarde subiendo al Monte de Santa Cruz, el principal mirador panorámico de Ribadeo.
Noche
Tapas, vinos y vida nocturna
La mejor forma de terminar el día es salir a tapear por el centro. Muchos restaurantes ofrecen cocina en miniatura con productos de proximidad, acompañada de vinos con Denominación de Origen gallega.
Si te apetece alargar la noche, Ribadeo cuenta con locales animados, terrazas y bares con música en directo que hacen de su ambiente nocturno uno de los más animados de la comarca.
Día 2
Mañana
Ruta costera, Isla Pancha y Rinlo
Puedes empezar la jornada junto al mar, recorriendo la ruta de miradores que discurre entre acantilados y praderas abiertas. Es un tramo perfecto para caminar con calma, tomar fotos y disfrutar del paisaje atlántico.
A medio camino te espera Isla Pancha, con sus faros emblemáticos, uno de los lugares más fotografiados de Ribadeo. Poco después, el camino te lleva hasta Rinlo, antiguo puerto medieval que conserva su trazado tradicional y su alma marinera. Pasea por sus congostras, descubre las cetáreas construidas sobre la roca viva y, si te apetece, tómate un café junto al puerto.
Tarde
Playas y As Catedrais
Después de comer, sigue explorando el litoral por la conocida Ruta de las Playas, un recorrido entre arenales escondidos, entrantes rocosos y paisajes moldeados por el mar. Algunas paradas recomendadas: Esteiro, Illas u Os Castros, perfectas para bañarse o sentarse a admirar las vistas.
Reserva la última hora de la tarde para visitar la Playa de As Catedrais, el gran icono natural de Ribadeo. Declarada Monumento Natural, sus arcos de piedra, bufaderos y acantilados esculpidos por la marea crean un escenario espectacular. Asegúrate de consultar el horario de bajamar para disfrutarla en todo su esplendor.
Noche
Cena con sabor atlántico y ambiente cultural
A lo largo de la N-634 encontrarás varios restaurantes con especialidades locales: carnes a la brasa, fabada, habas con almejas o pescados frescos. Otra opción es volver al centro y optar por un menú degustación con productos de cercanía.
Para terminar el día, Ribadeo ofrece una agenda cultural variada: conciertos, teatro, espectáculos de pequeño formato… Consulta la programación y anímate a cerrar la jornada con un plan diferente.
Día 3
Mañana
Senderismo, miradores y paisajes del interior
El tercer día es ideal para descubrir la parte más tranquila y menos conocida del municipio. Puedes alquilar una bicicleta o prepararte para una ruta de senderismo por el interior de Ribadeo. Una de las más recomendables es la Ruta del Monte, que conecta las parroquias de Ove y Remourelle.
Durante el recorrido encontrarás miradores como el de Santa Cruz, A Coroa o O Comado. También podrás acercarte a enclaves arqueológicos como las mámoas de Rego de Mel. Todos son paisajes verdes y serenos, perfectos para desconectar y disfrutar del entorno natural a otro ritmo.
Tarde
Santuario, fervenza y tesoros ocultos
Por la tarde te sugerimos una escapada a A Ponte (Arante) para visitar el Santuario de Nosa Señora das Virtudes, conocido por sus valiosas pinturas murales y apodado “la Capilla Sixtina del Camino del Norte”.
Muy cerca se encuentra el Pozo Mouro o Fervenza de Lexoso, una pequeña cascada rodeada de vegetación autóctona que sorprende por su belleza. De regreso al centro, aún puedes hacer dos paradas especiales: el Pazo de Cedofeita, joya de la arquitectura hidalga gallega (visita exterior), y las Pegadas do Encanto, unos curiosos petroglifos podomorfos situados en una zona de leyenda (visita bajo reserva).
Noche
Despedida con mariscos y vistas a la ría
Para cerrar esta escapada de tres días, nada mejor que una cena a base de mariscos del Cantábrico. Podrás probar centollas, nécoras, percebes, camarones o incluso ostras cultivadas en la ría (solo en temporada).
Escoge un restaurante con terraza junto al puerto o en el centro histórico y brinda por una experiencia completa en Ribadeo: cultura, naturaleza, sabor y autenticidad.